Raúl Pérez López es, además de mi sobrino, alguien cuya alegría, entusiasmo y brillantez me sorprenden cada vez que le veo como si no lo conociera desde que nació. Me consta, por nuestras conversaciones, que es un lector ávido y con un gusto extraordinario; y a partir de ahora, habrá oportunidad también de leerlo en su blog TizztyBlue, de donde extraigo esta entrada que a mí me ha cautivado:
"Aquí y ahora , en relieve , en fofi , con mayúsculas góticas , subrayado.
El pájaro de fuego es el ingenio mecánico que sobrevuela los dormitorios y nos invita a hacer llamadas en medio de la noche. Es el que impide que todo esto se nos olvide ; esta tarea de bueyes tercos de demostrar que existe otra manera de hacerlo , dejando un surco , destrozando algunas piedras que parecían intratables. Grita fuerte , el cabrón. Es grotesco y a veces terrorífico, pero hay que conocerlo hasta la última pieza.
Una trama. Mil artefactos. Puesta en escena , estilo. Sube."
1 comentario:
Me parece interesante. Lo iré siguiendo, tiene enganche, pegamento, imán, gracia, fuerza, humor, punzadas que... bueno, lo iré siguiendo. Me gustó aquello del pájaro de fuego.
Tu Viktor
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