MIS MITOS ADOLESCENTES
Y yo os veo
mis mitos adolescentes
solos
el domingo y el hijo
únicos y separados
por la cerveza sin alcohol y el zumo.
Comiéndoos las coquinas
que otros recogen.
Pidiendo la cuenta.
Aquellos que me
rechazabais
la carne asustada
por no abrirme de
piernas
por una copa vuestra.
Y yo os miro en las entradas
sobre los vientres y las canas,
en las caras de asco
como una resaca de mundo.
Y los niños.
Y yo os miro,
desde mi mesa,
la cerveza sin alcohol y el zumo,
las barrigas, las canas y el asco vuestro.
Y os miro con cara de lamento
porque ahora sí me abriría
de piernas.
Y ya no me lo vais a pedir
nunca.
Y yo os veo
mis mitos adolescentes
solos
el domingo y el hijo
únicos y separados
por la cerveza sin alcohol y el zumo.
Comiéndoos las coquinas
que otros recogen.
Pidiendo la cuenta.
Aquellos que me
rechazabais
la carne asustada
por no abrirme de
piernas
por una copa vuestra.
Y yo os miro en las entradas
sobre los vientres y las canas,
en las caras de asco
como una resaca de mundo.
Y los niños.
Y yo os miro,
desde mi mesa,
la cerveza sin alcohol y el zumo,
las barrigas, las canas y el asco vuestro.
Y os miro con cara de lamento
porque ahora sí me abriría
de piernas.
Y ya no me lo vais a pedir
nunca.
2 comentarios:
Ayyys, pero que familiar y cercano me suena esto. Cuanta verdad sin pudor ni moralina.
Bien por Eva, que una vez consiguió que Adán comiera la manzana y once restantes se quedo esperándola mientras el guaqui se hacia unas birras en el jardín de enfrente...
Buenas noches a Ana y Eva.
Vuestro Viktor
Inmenso poema. Muy muy bueno. Queremos más como este.
Bartleby
Publicar un comentario