Que soy libre, me dicen.
Pero si quisiera tener otro hijo
tendría que llevarlo al Banco de la esquina
porque suya es mi casa.
Mi niño llamaría padre al director
y madre a la cajera,
aprendería a andar con una silla de oficinista,
dormiría en un cajón del archivador
y yo sólo sería un pariente lejano,
que le sonreiría desde mi puesto en la cola.
Me pasaría de vez en cuando con la excusa de ampliar la hipoteca,
sólo para ver qué tal me lo crían,
cómo le afecta el aire acondicionado,
si sabe poner un fax
y si el director se acuerda de sus cumpleaños.
12 comentarios:
te noto en forma Ana
muy bien.
muy bueno.
visita mi blog que he subido un poema tuyo
Esa forma tuya de enfrentarte con la realidad, desde la más escandalosa de las formas líricas, es sin duda el gran atractivo de tu poesía. No se necesita ser almabicado y pretencioso para "obtener" poesía de lo cotidiano. Tu eres una gran libadora de sensaciones, sensaciones imperceptibles para muchos, minúsculas para otros, pero que cuando se saben mirar,se convierten en mayúsculas. Palabras hay muchas, quizás demasiadas, pero las palabras afortunadas e importantes para renombrar al lenguaje que ha de pertenecernos, que ha de ser nuestra salida de emergencia aunque no sea nuestro sino de otros hay apenas un puñado, eso sí utilizadas de manera inteligente. Sigo sorprendiéndome cada vez que entro a tu blog y eso no es fácil porque como dice un amigo mío: Tú querida mía en literatura eres de gustos caros.
Un abrazo.
Sonia.
Querida Ana, aprecio y aplaudo la ironía y el poema, pero ¿crees tu que los bancos van a convertirse en lsas guarderías públicas y gratuitas que tanto hemos anhelado?
Lo bueno de hipotecar la existencia es que ya no te queda nada más que vender, y así, carente de interés ¿qué queda? la esencia, que como no cotiza, se puede disfrutar como un polo de limón un 5 de agosto...
Ana me ha hecho sonreir ahora mismo se lo pongo a las manzanas.
Esta vez la respuesta es facilísima Jesús: NO.
Un beso, Miriam G.
Por si acaso Ana no les des ideas....besos
Muy bueno. ¿Sería un niño "adoptado" o "adaptado"?
Fausto está que arde. Antes le vendían las almas enteritas y ahora sólo las hipotecan...
Conozco un banco, en la esquina, que sí te haría libre. Cada mañana me siento en él a ver pasar la vida.
jaja, tiene coña. Y ahora un chiste:
- Es usted mileurista?
- No sé, no he leido a Mileure.
Saludos
Ana, como Kebrantaversos, te veo en forma, muy en forma y me gusta. Leer tus poemas, además de un gustazo, se está convirtiendo en adictivo y eso es bueno (para mí). Un abrazo muy fuerte.
Muchas gracias a todos, de verdad.
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