El blog de Ana Pérez Cañamares - poeta

lunes, diciembre 21, 2009

Argi


Argi, el perro que vivía con Batania, ha muerto. Y Batania, en su blog Neorrabioso, le está dedicando las palabras de despedida más bellas que yo haya leído en mucho tiempo.




Yo quiero que a Batania se le pase la pena, pero también quiero que recuerde y que lo cuente, porque nunca he vivido con un perro y gracias a Argi al menos sé lo que me pierdo y puedo adoptar un pedacito de su memoria.

3 comentarios:

ada dijo...

Es imposible imaginar cuánto se puede querer a un perro o a un gato o a cualquier animal...el día que me falte Rodolfito...no quiero ni pensarlo. Siento un montón lo de Argi...era un perro precioso :)

Neorrabioso dijo...

Ah, no, pero no penséis que estoy llorando todo el rato, no: de hecho, escribo esos homenajes contentísimo, muy alegre, creo que voy a llegar a la decena de lo contento que me pongo reviviéndolo. Otra cosa es cuando llego a casa, al mediodía o por la noche, cuando llegan las horas habituales donde le sacaba al parque: ahí sí que me viene la tristeza de repente. O cuando tiro alguna cosa de comida sobrante a la basura, o voy al súper y me encuentro con comida de perro, o el miedo que he cogido a toda la gente del parque que lleva diez días sin verme y yo no quiero verla, porque se me hace cuesta arriba presentarme allí sin Argi.

Abrazos. Gran blog jartit@detó. Yo te enviaré mis jartadas a tu correo cuando lo necesite.

Hasta pronto.

Ángel Muñoz dijo...

precioso perro tenía bata