Yo también llevo dentro un Calígula
un Robespierre y mi porción de nazi.
Podría haber sido un verdugo papal
en la España de los Austrias,
o Cortés, Cortés el asesino.
Todo depende del tiempo que tarde
en sacrificar mis dudas.
UBERTO STABILE
La línea de fuego (Ediciones Brosquil, Valencia, 2008)
No hay comentarios:
Publicar un comentario